«El humor, en contra de lo que muchos piensan, no está reñido con la seriedad, está reñido con el aburrimiento.»
Y por este motivo Carlos Barrio se ríe de todo. Tendremos la oportunidad de verle en acción el próximo 28 de febrero. De momento os dejamos con una entrevista:
– ¿Cómo fueron tus inicios en el mundo de la comedia?
Ha sido desde siempre, ya de niño me gustaba contar e inventar chistes, hacer imitaciones, etc. Ya más mayor, en el año 2001, en la Universidad, fundé con un compañero el grupo de teatro de ingeniería Química de la U. de Valladolid, se llamó Ingenieros Cómicos, y con ellos realicé mi primer monólogo. Desde entonces he parado y retomado en varias ocasiones la profesión según me lo permitía el trabajo como Consultor ya que en muchos proyectos estaba fuera del país.
– “Mientras lo estás disfrutando, mientras te estás riendo, no piensas en tus problemas”, ¿es tu lema, verdad? ¿Qué tipo de textos sueles ofrecer?
Sí así es. Creo que no hay nada más bonito en esta profesión que el conseguir que durante una o dos horas la gente deje de pensar en sus problemas. En mis textos hablo mucho de la situación actual, de la falta de sentido común que hay actualmente. Y de cosas que me pasan en mi día a día.
– ¿Y chistes cortos? ¿¡Nos cuentas alguno!?
Ahí va, Le dice un amigo a otro: “Tú también haces todo mal o estas soltero”
– ¿Hay algún tema sobre el que nunca te reirías?
Creo que es sano reírse de todo, o, al menos, tomárselo con humor. El humor, en contra de lo que muchos piensan, no está reñido con la seriedad, está reñido con el aburrimiento.
La risa es un motor tanto para superar situaciones duras como para solucionar conflictos. La broma nos puede ayudar a abrir la mente, nos hace pensar y concienciarnos de la importancia de aspectos en los que de otro modo no nos habríamos parado a reflexionar. La comedia es ficción, como el drama o como cualquier otro género, y así hay que entenderla.
– Actualmente compaginas tu trabajo como coach y formador en habilidades comunicativas con el mundo de la comedia, ¿puedes explicarnos cómo lo haces y en qué consiste tu trabajo?
Es verdad que hago muchas cosas: Con El Arte de Ser Profesional, imparto formación en Soft Skills y habilidades comunicativas en empresas, escuelas de negocio y universidades. De hecho, el año pasado quedé clasificado como el tercer mejor orador del país en temas de desarrollo y crecimiento personal según el certamen Speaker Talent. Lo que me diferencia de otras empresas es que el aprendizaje de las personas que reciben la formación es mayor ya que utilizo herramientas propias del mundo artístico y del coaching, aplicados al día a día profesional.
También trabajo como coach personal y de empresa, acompañando a mis clientes a alcanzar sus objetivos. Y estoy especializándome en coaching para artistas.
Desde finales de 2014 cuando dejé la empresa privada y me puse por mi cuenta, ha sido más fácil compaginarlo todo. Para ello es fundamental cuadrar la agenda lo mejor posible y hacer lo que a uno le gusta y le apasiona. Ahora que lo hago merece la pena y disfruto incluso en los días que se solapan varios eventos, viajes, o formaciones y estoy varias jornadas sin apenas tiempo para descansar.
– Recibiste el premio nacional de comedia en Aranda de Duero y fuiste galardonado en el Certamen Rincón del Erizo en Valladolid, organizado por J.J. Vaquero, entre otros, ¿supuso un antes y un después en tu trayectoria?
Ambos fueron una alegría. Hacer reír es muy difícil, y siempre, sobre todo al principio, cuando surgen las inseguridades, te cuestionas. Hacerte hueco en este mundo no es un camino fácil. Así que cuando llegan los reconocimientos externos, sobre todo el de Aranda, -que fue en la época en la que estaba empezando más en serio-, aumentas la confianza en ti mismo.
Los premios abren puertas, de eso no hay duda. Muchas empezaron a abrirse después de ganar en Valladolid, aunque lo más valioso que te llevas es a las personas que esta profesión te permite conocer. Recuerdo con mucho cariño el concurso de Arnedo, en el que quedé segundo, por la gente de la organización (Lubumbas) a los que desde aquí envío un saludo.
– También has trabajado en televisión, y has sido presentador de eventos y galas, ¿cómo consigues compaginar tantísima actividad laboral con tu vida personal?
Diciendo que sí a los proyectos chulos que me proponen. Cuando un proyecto me supone un reto no puedo no subirme al tren. Como me gusta decir: primero nos tiramos a la piscina, luego ya nos acostumbraremos a la temperatura del agua. Además, y por si fuera poco, ahora estoy un par de fines de semana al mes en El Pequeño teatro de la Comedia de Madrid con mi nuevo monólogo “Reir en Tiempos Revueltos” que está teniendo una gran crítica.
Y por supuesto con el apoyo incondicional de mi chica, que entiende las necesidades de esta profesión y a veces hacemos auténticos malabares en las agendas para apañarnos con los peques.
– ¡También oficias bodas! ¿Cuéntanos en qué consiste?
Jajaja, sí. Esto surgió de casualidad. Unos amigos necesitaban un actor para que les casara, porque ya estaban casados por el juzgado y querían realizar una boda civil en el restaurante. Y dijeron que qué mejor actor que yo… Así que me metí de lleno en un nuevo fregao… Hasta hice media ceremonia en euskera (la novia es vasca y la boda era en el restaurante de San Juan de Gaztelugatxe, que es un sitio precioso). Salió tan bien que, de esa boda, y solo con el boca a boca, salieron otras dos, y de esas a su vez han salido más. Tanto es así que actualmente estoy colaborando con alguna empresa del sector. Me gusta mucho oficiar ceremonias porque colaboro a hacer especial un día tan feliz, para los novios, amigos y familiares. No hago todas las que me gustaría porque me lleva bastante tiempo prepararlas, piensa que quedo con los novios para conocerles, para personalizar la ceremonia como ellos quieren… Para que te hagas una idea… ¡Para una este verano pasado hasta tuve que aprender Lituano!
– Además, te queda tiempo para ser solidario y colaborar en eventos como el del próximo 28 de febrero a favor de la asociación de esclerodermia, ¿qué te motivó para decir que sí?
Con mi trabajo intento siempre hacer feliz a la gente, si de esta forma puedo hacer doblemente feliz a la gente, por un lado haciéndoles pasar un buen rato, y por otro colaborando con la asociación de esclerodermia , pues mejor que mejor. Además, coincide, me parece, con el día Mundial de las enfermedades raras, así que ayudamos a dar visibilidad a la enfermedad y a quienes la padecen.
– No es la primera vez que colaboras con la asociación conciertos solidarios, ¿crees que a través de este tipo de eventos se puede hacer del mundo un sitio mejor o aún queda mucho por hacer?
Queda muchísimo por hacer, y quizá no podamos cambiar el mundo, pero si que podemos cambiar la parte del mundo en la que nos ha tocado vivir. Eso e intentar que cada vez más personas en todo el mundo piensen así.
– ¿Con qué nos sorprenderás el 28 de febrero en la sala Cadillac Solidario? ¡Anima a nuestros lectores a comprar su entrada anticipada!
Seguro que con mucha actualidad y algún secreto sobre mi. Así que lectores, no dejéis que os lo cuenten, sacad ya la entrada para que no os quedéis fuera y podáis disfrutar de una gran noche de risas y solidaridad! Os doy mi palabra!
– Gracias por tu colaboración.
Gracias a vosotros. Ha sido un verdadero placer.
Puedes comprar ya la entrada en el siguiente enlace:
¿Cómo llegaste a entrar en este mundo de los cómicos?
El próximo 9 de diciembre actúas junto a otros cantautores en la sala La Sal de Madrid en un concierto solidario organizado por la asociación conciertos solidarios a favor de Microbibliotecas y Little silverback, ¿qué te impulsó para colaborar en un evento con estas características?